
Mi nombre es Frank Botz y soy de Puerto Rico Misiones. A los trece años ya tuve la idea de querer hacer un año escolar en Alemania. Los años pasaron y al tener 15 presenté todos los papeles. Meses después, llegó la noticia tan esperada: Fui aceptado!
Y ahora había que planificar: ¿Cómo llego a Alemania? Ya el Coronavirus se había expandido en todo el mundo: Fronteras cerradas, vuelos suspendidos…solicitar visas en la Embajada en ese momento tampoco era posible. Todo se veía complicado.
Fueron meses de incertidumbre pero todo fue acomodándose a mi favor.
Llegué a Frankfurt y mi primer familia me recibió en el aeropuerto. No podía creer lo que estaba viviendo. Todo me parecía un sueño. Fui a la escuela… Me encantó. No podía creer lo inmensa que era. Gigante!!! Tantos alumnos, tantos docentes y aulas. Era impresionante. Mis compañeros alemanes a igual que los alumnos internacionales eran muy abiertos. Tantas culturas diferentes. Era algo de no creer. Conversar con jóvenes de Pakistán, de Kosovo, de Rumania ó de Namibia era algo increíble. Me llevo muy bien con todos.
Lamentablemente tuvimos sólo dos meses de clase presencial y luego desde enero solo online. Estoy aprendiendo muchísimo a través de los zooms también y a pesar de la cuarentena estricta uno puede disfrutar de muchas cosas también. También paso mucho tiempo con mi familia alemana, hablamos sobre muchos temas interesantes, cocinamos muchas recetas tanto alemanas como argentinas…. Salimos a andar en bicicleta y hacemos pequeñas fogatas con pancitos en el jardín. Es un año tan soñado y realmente es mejor de lo que pensé.
Se lo recomiendo a todos los jóvenes y les digo que es una gran experiencia para toda la vida.
Marbach am Necker, 27 de abril 2021